Si pensamos en Siberia nos vendrán a la mente imágenes de tierras extremas, de fría tundra o de exiliados forzosos en los Gulag, pero seguro que no aparecerán imágenes de pianos. Sin embargo, a Sophy Roberts, periodista y escritora británica, sí que le vinieron y no solo eso, le interesaron tanto que realizó diversos viajes durante tres años buscando los pianos perdidos en aquellas duras tierras.
Los últimos pianos de Siberia, editado por Seix Barral, es un libro entre la literatura de viajes y la historia de la música que personalmente son dos de mis temas favoritos.
Un piano en Kamchatka
A partir de una foto recibida desde la lejana Kamchatka donde un pianista toca para un pequeño grupo de gente en medio de una llanura volcánica, la autora viajará poViaje al Ussuri. Tras los pasos de Dersú Uzalá (2014) – Cristian Segura y Andrea Rodésr toda Siberia con la obsesión de encontrar un piano, instrumento prometido a la pianista mongola Odgerel Sampilnorov.
Un recorrido que le llevará desde Jabárovsk tierra del tigre de Amur, a la cordillera del Altái. De Irtkusk, ciudad cruce de caminos conocida como la París de Siberia a la isla de Sajalín, antigua colonia penitenciaria a donde llegó Chejov a finales del XIX para hacer un reportaje sobre las duras condiciones de vida de los presos allí deportados. De Ekaterimburgo, ciudad donde fueron asesinados el Zar Nicolás II y toda su familia a Novosibirsk , ciudad que alberga el Coliseo de Siberia el teatro más grande de Rusia y en el que se guardaron numerosas obras de arte durante la Gran Guerra Patriótica. Siempre siguiendo el rastro de pianos.
Siberia, tierra de deportados y de pianos

Aunque pueda parecer extraño, ya que Siberia ha sido tradicionalmente una tierra de destierro que ha ido recibiendo distintas remesas de deportados desde tiempos de los zares, hay muchos más pianos de los que pudiéramos pensar. Y es que muchos de esos deportados se llevaron sus instrumentos. El piano, en menos de 20 años desde su invención, se convirtió en el instrumento estrella en la Europa del XIX, un símbolo de prestigio para las familias europeas más pudientes. En Rusia además, la fama de Franz Liszt que realizó una gira por el país y era una autentica estrella con miles de fans capaces de conservar mechones de su pelo en un medallón, contribuyó a colocarlo en lo más alto. A finales del XVIII y principios del XIX el piano se puso de moda en el país y se importaron muchos pianos a toda Rusia, también se empezó la fabricación allí. Hasta Grigori Potemkin (sí, el que dio nombre al famoso acorazado) estuvo apunto de contratar al mismísimo Mozart.
La búsqueda lleva a la autora a entrevistarse con afinadores de pianos, músicos o coleccionistas, pero también con gente que simplemente ha heredado un piano, un bien muy preciado en un país en el que la música es muy importante. Además como en todo gran viaje, también conoceremos a personajes entrañables como Leonid Kaloshin el bibliotecario de Ust-Koska en la cordillera de Altái o el Tío Vitya que será guía y protector de la autora durante gran parte del viaje.
Un libro muy interesante que que nos da una visión distinta de Siberia, en esta ocasión con la música y los instrumentos como hilo conductor.
Los últimos pianos de Siberia – Sophy Roberts
Editorial: Seix Barral
Año 2021 – 448 páginas
ISBN-10 : 8432237906
ISBN-13 : 978-8432237904